10 consejos para salir victorioso del coworking

10 consejos para salir victorioso del coworking

Trabajar desde casa es increíble... hasta que tu mascota se sube al teclado y tu vecino se pone creativo y decide fabricar una máquina del tiempo, para la cual necesitará todo tipo de herramientas (cuanto más ruidosas, mejor).

Para muchos profesionales modernos, trabajar desde casa cada tanto es un privilegio que las empresas otorgan, pero ¿qué ambiente de trabajo nos permite ser más productivos, la oficina en casa o la oficina real?

A continuación, recopilamos una lista de recomendaciones excelentes para trabajar desde casa con ayuda de algunos de nuestros increíbles colegas de trabajo.

 

1. Comienza temprano

Si trabajas en una oficina, el viaje al trabajo puede ayudar a despabilarte y sentirte listo y productivo cuando llegas a tu escritorio. En casa, sin embargo, la transición de la almohada al equipo puede ser mucho más abrupta.

Aunque te resulte difícil de creer, una manera de mejorar tu productividad cuando trabajas en casa es poner manos a la obra apenas te despiertas. O luego de realizar actividad física en la mañanaComenzar un proyecto apenas te levantas de la cama puede ser clave para progresar más rápidamente durante el día. De lo contrario, te arriesgas a que un desayuno prolongado y la pereza innata de la mañana se lleven tu motivación.

 

2. Haz de cuenta que debes ir a la oficina

Las ideas asociadas al trabajo en una oficina real pueden hacer que te sientas más productivo, y no tienes por qué renunciar a ellas si trabajas desde casa.

Cuando trabajas desde casa, continúa la rutina que seguirías si fueras a una oficina: programa la alarma del despertador, prepárate café y vístete bien. Los navegadores de Internet como Google Chrome incluso te permiten configurar múltiples cuentas con distintas barras de herramientas en la parte superior. Por ejemplo, una barra de herramientas para el trabajo en casa y otra para el trabajo en la oficina.

 

3. Organiza el día como si estuvieras en la oficina

Cuando trabajas en casa, eres tu propio jefe, pero si no tienes reuniones o compromisos que te den pequeños descansos durante el día, podrías perder la concentración o terminar agotado. ¡A veces olvidamos hasta lavarnos las manos!

Para mantener una organización, divide tus tareas del día y en qué momento las llevarás a cabo. Si tienes un calendario en línea, crea eventos personales y recordatorios para pasar de una tarea a otra. Con el Calendario de Google puedes hacer esto fácilmente.

 

4. Ten tu espacio de trabajo

Que no trabajes en una oficina no significa que no puedas tener tu oficina propia. En lugar de tumbarte en el sofá o en la cama (lugares que asociamos con actividades en nuestro tiempo libre), asigna una habitación o un espacio específicos para trabajar. Puedes inclusive aplicar muchas de las estrategias de limpieza de oficina en tu propio espacio de trabajo en casa. Tener tu espacio de trabajo ordenado y limpio también te evitará cualquier accidente que puedas sufrir producto del desorden.

 

5. No te quedes en casa

¿El teletrabajo no te resulta práctico? Entonces sal. Las cafeterías, las bibliotecas, los lugares públicos y otros espacios con Wi-Fi pueden ayudar a simular un entorno de oficina que te permitirá mantener la productividad aun cuando no te encuentres en una oficina real. De hecho, moverte es una práctica que debes tener en cuenta, inclusive cuando regreses a la oficina.

 

6. Comprométete a hacer más

Los proyectos siempre llevan más tiempo del estimado inicialmente, por lo que a menudo logramos hacer menos de lo planeado. Al igual que debemos exagerar un poco el tiempo que dedicaremos a una actividad, también debemos sobreestimar el número de tareas que llevaremos a cabo durante el día. Aun si no alcanzas el objetivo, terminarás el día con una lista de tareas concretas completadas. Sea como fuere, intenta siempre adoptar hábitos que maximicen tu rendimiento.

 

7. Planifica tus tareas de antemano

Dedicar demasiado tiempo a definir lo que harás durante el día puede evitar que llegues a hacer esas tareas. Además, si planeas tu lista de tareas con tan poco tiempo, podrías sentirte tentado a cambiar cosas sobre la marcha.

Cambiar lo que necesites en tu agenda es importante, pero también lo es respetar las actividades programadas para el día. Trata de registrar las actividades en tu agenda el día anterior. Esto hará que tengan más peso cuando pongas manos a la obra el día siguiente. Inclusive, sabrás en qué momentos del día podrás tomar una pausa activa.

 

8. Recurre a la tecnología para mantenerte conectado

Trabajar desde casa puede ayudarte a centrarte en tu trabajo en el corto plazo, pero también puede hacerte sentir desconectado de lo que sucede en la oficina. Las apps de mensajes y las herramientas de videoconferencias pueden ayudarte a mantener la comunicación con tus colegas y apreciar cómo impacta tu trabajo.

 

9. Habla de lo que esperas lograr con alguien que esté en casa contigo

Quizá estés trabajando desde casa, pero tengas compañía. Asegúrate de que tus compañeros, hermanos, padres, parejas y hasta mascotas (bien, quizá no las mascotas) respeten tu espacio durante las horas de trabajo. El hecho de que estés trabajando desde casa no significa que estés realmente en casa.

 

10. Toma un descanso

Es tan fácil distraerse cuando trabajas desde casa que puede tentarte la idea de no tomar nunca un descanso para evitar esta situación. No permitas que la culpa de trabajar desde la comodidad de tu hogar te evite tomar pequeños descansos. Inclusive en casa se puede sufrir de estrés laboral. En lugar de simplemente abrir YouTube y ver algunos videos, aprovecha tus descansos para alejarte del escritorio. Sal a dar un paseo o pasa algo de tiempo con quien esté contigo en casa. Tu postura te lo agradecerá. Eso sí, evita al máximo procrastinar.


Trabajar en casa puede ser un gran reto pero también una oportunidad para ser más productivo. 


Fuente: Hubspot