- Por Camila Ante
Cada vez que genero asesorías personalizadas me gusta primero escuchar, por que, casi siempre la persona que está requiriendo algún servicio de marketing digital está a la defensiva, puesto que, en primera instancia, se han topado con personas que les han prometido el cielo, afirmando que: “conocen todo acerca del marketing digital” y que las ventas se les van a disparar en menos de una semana.
Otras han pedido ayuda en los grupos de facebook y terminan “contratando” a un tercero que necesita solamente dinero. En otras ocasiones, el cliente no sabe ni lo que quiere con base a su marketing digital, pero, tiene en mente que es importante dar ese paso. Y MUCHOS MÁS CASOS.
Después de escucharlos, de comprender su nivel de frustración y miedo, y sus expectativas, es ahí, donde empiezo a realizar un diagnóstico base. ¿Qué significa esto? Reviso todos sus canales digitales, desde la página web hasta sus redes sociales, para comprender todo su ecosistema digital. Posteriormente, les comento en qué fase se encuentran.
A veces el cliente considera que lo que tiene está bien, pero, en realidad es todo lo contrario, donde a veces, su diseño de logo no es el más adecuado, las fotografías que posee no emiten la calidad de sus productos, el concepto del contenido no tiene un objetivo, el diseño de cada post no tienen los lineamientos de la marca y otros errores en común. Y es ahí, donde caen en cuenta el por qué no están vendiendo.
No me canso de repetirlo. El marketing digital no es una “cajita mágica” donde tu subes algún contenido y ¡zaz! Ventas por montón. ¡No! Es todo un procedimiento para generar recordación, donde el personaje principal no es la empresa sino el cliente.
Antes de finalizar, quiero preguntarte lo siguiente: Si estuvieras en la posición de ser tu propio cliente, ¿Interactuarías con tu contenido digital? Si la respuesta es NO, ¡ojo! Ya tienes un problema.
Si deseas conocer el estado de tu empresa. ¡Coméntanos! Te ayudamos.
